¿Te imaginas un día en el que más de 485 ayuntamientos, 161 Empresas, 214 organizaciones y 10.000 personas nos pusiéramos de acuerdo para visibilizar la degradación medioambiental que estamos viviendo en la actualidad?
Pues ese día se viene celebrando desde hace más de doce años en todo el mundo, impulsado y concebido por World Wildlife Fund (WWF), como gesto simbólico para concienciar a la sociedad sobre la necesidad de adoptar medidas frente al cambio climático y las emisiones contaminantes. Se conoce como la Hora del Planeta y se celebra, cada año, el último sábado de marzo, de 20.30 a 21.30 horas, apagando las luces y otros aparatos eléctricos no indispensables.
En Decathlon nos unimos a este gran reto hace 3 años, animando a todas nuestras tiendas y almacenes a formar parte de la mayor movilización ambiental mundial y también implicando a nuestros clientes y usuarios.
Con este pequeño gesto, en 2019 más de 90 de nuestros centros han apagado las luces de sus rótulos para unirse a este movimiento global que pretende despertar conciencias que ayuden a mejorar el entorno en el que vivimos. El mensaje que compartimos junto a WWF es que “dependemos de la naturaleza para vivir. No solo nos da el aire que respiramos, el agua que bebemos, los alimentos, medicinas y el refugio que necesitamos, sino que sustenta el propio sistema económico mundial. Sin embargo, la destrucción de hábitats, el tráfico de especies, la contaminación y el cambio climático está provocando una degradación de la naturaleza sin precedentes” y esto para nosotros supone un gran reto ya que impacta de forma directa el terreno de juego donde practicamos la mayoría de nuestros deportes.
Así, este movimiento global nos hace tomar conciencia y exigir desde nuestros centros ser parte de la solución ante este reto que nos implica a todos. Formar parte de gestos tan simbólicos como este hace que nuestros colaboradores y clientes sepan que tenemos un compromiso firme con el planeta en el que vivimos. Retos como este ponen en valor nuestras acciones cotidianas como la gestión de nuestros residuos, las acciones medioambientales que realizamos cada año, la eficiencia energética que buscan todos y cada uno de nuestros centros y volvemos a poner en valor el compromiso de sostenibilidad que estamos creando en nuestras tiendas y el impacto que generemos con todos estos pequeños actos.
Quizás apagar los rótulos de nuestros centros sea solo el pequeño gesto que esconde el compromiso que tenemos todos los colaboradores implicados en crear una empresa más sostenible y respetuosa con el medio ambiente. Un gesto que pone de manifiesto que lo que ocurre en nuestros entornos naturales en los que tanto nos gusta practicar deporte nos importa.
Para los colaboradores no solo es un gesto, es la acción que nos une durante una hora dando un mensaje común: Apagamos las luces hoy para un futuro más limpio, más sostenible y para que las personas que trabajamos en Decathlon podamos estar orgullosas de las acciones que llevamos a cabo cada día para ser parte activa desde nuestros centros en la lucha contra el cambio climático.